Los pensamientos de una mujer agridulce

domingo, enero 18, 2009

Se vale decir no


Después de enfrentarme a mi terquedad y a todas las miserias que mi mayor defecto me hace confrontar, logré rendirme... logré quebrarme y me sentí dichosa de poder pronunciar un no. No sólo por el poder que contiene en sí esa palabra, sino porque esa palabra es la clave para renunciar a todo lo que me ata a mis codependencias.


Siempre tuve esa necesidad extraña de probarle al mundo que puedo, para no sentirme una fracasada, para no enfrentarme al miedo... esta vez observé al mundo al que tanto temía y descubrí que a nadie le importarían mis decisiones.


¿Por qué tengo que estar quebrandome la cabeza para ser todóloga? ... tenemos dones, tenemos capacidades, pero también tenemos defectos y cosas que no se nos dan y no es malo reconocerlas... de hecho, considero que el ser capaz de admitir nuestras propias debilidades nos hace más fuertes ante las batallas que vendrán.


Ahora se qué cosas no son para mí... con más facilidad reconozco y anhelo lo que sí me corresponde....


Feliz Año Nuevo.